martes, 17 de junio de 2008

¿Cuál es el futuro de la música?


El título del post debería ser ¿Cuál es el futuro de la industria musical? porque está claro que el futuro de la música está en los artistas y en el público que nutre a esos mismos artistas. Aunque a priori todos tenemos una opinión más o menos clara, el tema no es tan sencillo como puede parecer.

Las discográficas lo tienen claro, el CD. Ese soporte delicado y denostado por los auténticos melómanos (ya que no tiene la "calidez" del vinilo) es, según ellos, lo que hay, y de ahí no les van a sacar. La verdad, yo creo que es como las petroleras, no buscarán otro soporte mientras les quede algún resquicio y lo siga comprando la gente, pero las cosas van de mal en peor. El CD se puede dar por muerto, como mínimo está herido de muerte.

Por otro lado tenemos todo lo contrario, los que ya han dado el salto y han pasado a la era de la información. En esta época en la que todo es información y bits que se mueven de acá para allá, agarrarse a un formato físico como puede ser el CD (ni hablar de vinilo o cassette, ¡por favor!) les parece algo antediluviano, ahí están las redes, legales, alegales o ilegales, de pago o gratuitas (¿si es gratis no es industria?), portales como itunes, Amazon o Magnatune (por citar algunas) baten records de ventas y se hacen con el mercado de internet, además, ha conseguido que escuchemos más música de la que jamás hemos escuchado, vas por la calle, miras alrededor y es imposible (haced la prueba) que no veas a nadie sin unos cascos puestos.

Ahora bien, ¿qué problema tienen las descargas?. Pues básicamente dos: primero, que si se nos estropea dónde lo tenemos guardado (y los ordenadores fallan, antes o después), lo perdemos; y dos, que no se pueden tocar. A los que nos gusta la música mucho (pero mucho mucho) al final nos sale el coleccionista que llevamos dentro, y al coleccionista (al menos de momento) le gusta tocar su colección, admirarla toda junta en sus cajones/estanterías. A nadie le impresiona un disco duro con 600 carpetas de MP3's (todo el mundo lo tiene) pero una buena colección de discos, acumuladas durante años con mimo y dedicación (y dinero, no nos engañemos) sí. Esa es la gente que gasta y gastará dinero en música y a la que deberían mirar las discográficas (cosas que nunca harán). Durante años, en vez de mirar a estos, se han dedicado al "mercado" y ahora ese mercado se les escapa entre los dedos porque nadie comprará un disco entero por el single que han colado en la radiofórmula de turno. Simplemente lo pueden tener en 2 minutos buscando en el emule o bajándolo de cualquier lado (ya ni siquiera se molestan en comprar el grandes éxitos veraniego, no tiene sentido).

En fin, ¿qué debería pasar?. Pues no lo tengo claro. Las descargas están bien pero a mi, personalmente, siguen sin convencerme, necesito algo tangible y que pueda tener en mi repisita, que pueda abrir y poner en mi tocadiscos/pletina/CD/lector de turno. Está claro que el CD es un soporte muy sobrevalorado (en precio) y que no es de recibo que te cobren 20-25 euros por algo que apenas cuesta 1 producirlo. Otra cosa es que de las ganancias del disco quieran sacar todos los gastos de marketing y promoción, eso es problema de cómo funcionan las discográficas. Y el CD como formato también está un poco desfasado. Yo apostaría por memorias flash (pendrives o tarjetas, directamente) y por mimar al comprador. Ya hay grupos que lo han intentado, pero con ediciones especiales en pendrives, con 4 fotos o un vídeo y a unos precios más caros incluso que los discos originales, por ahí mal vamos. Una tarjeta de memoria de 1Gb (Un disco normal y en buena calidad cabe en menos de 100 Mb) cuesta menos de 5 euros (de paso hago publicidad a PC-Box, que tiene precios muy competentes en tarjetas de memoria), ¿Cuánto costaría una tirada de 10.000 unidades? ¿y de 50.000?. Yo lo veo muy fácil, 1 Gb de memoria, con el disco en la máxima calidad (MP3 con bitrate alto, incluso FLAC), la portada del disco, fotos de la grabación, el primer single en vídeo y todas las chorradas que nos encantan, todo ello en un estuche plástico que ocupa la décima parte que un CD convencional (un desahogo para quien tubiera 500 discos). ¿Es que a nadie se le ha ocurrido esto?. Yo pagaría por los discos en este formato, es duplicable, prácticamente indestructible...

¿Qué opinais?.

2 comentarios:

Txemari dijo...

Tu idea es muy buena pero me temo que la industria no te va a cobrar 5-10 euros por algo que antes te vendían por 25. Creemé, aunque te den la canción escrita con lápiz en un folio arrugado te van a seguir queriendo cobrar 25 leuros. Y lo peor será que alguno los pagaremos...

Por otro lado está el tema del coleccionista. Crees que la empresa discografica podría vivir solo de los coleccionistas? (Cuando digo vivir es manteniendo un nivel de ingresos alto que les permita tener sus yatecitos, ferraris y esas cosas) Pues no lo se, creo que no. Lo que está claro es que deberían cuidar a todos aquellos que son "fieles" a sus productos.

toolmamc dijo...

El problema es ese, les ha ido muy bien con muy poco esfuerzo y no están dispuestos a cambiar, obviamente.
El tema es que la inmensa mayoría de la gente si que está dispuesta a que cambien.

A ver quién gana.